Este salón decorado por Luisa Olazábal nos gusta tanto como el primer día que lo vimos. Simplicidad y orden, junto a acabados de altísima calidad, son la base de su decoración sencilla y atemporal.
La zona de estar está equipada con muebles de líneas rectas entre los que destaca la sinuosidad del sofá desenfundable, de Blasco, realizado con un lino en color crudo. Los medidos golpes de color vienen dados por la consola roja y la fotografía sobre metacrilato.
Junto al sofá de lino, una mesa auxiliar de corte industrial a juego con la lámpara hace de contrapunto y conecta esta zona con la estética del comedor.
En el comedor dominan los tonos grises y la madera de aspecto natural. La estantería lacada multiplica la funcionalidad de esta estancia al convertirla también en una zona de estudio o trabajo. Todo un ejemplo de decoración sencilla y, a la vez, sofisticada.
